jueves, 21 de julio de 2022

Descubriendo a... Música para noches en vela

Música para noches en vela

El insomnio es ese momento que se convierte en un lugar. La percepción del tiempo y tu espacio empieza a distorsionarse, pero con un rincón siempre disponible para facilitar algo de actividad. 

En ese espacio se disfrutan lo más bellos momentos de la noche. Hay algo excitante en burlar al sueño, no lo voy a negar. La lucha contra el cansancio y el desplome te lleva a muchos lugares y personalmente no voy a ninguno de esos lugares sin música. 

Un espacio libre en el día es una oportunidad para trabajar o para avanzar en tus vicios. El trabajo suele ser escribir y el vicio es leer. En ambos casos, la música tiene vela en este entierro en vida. 

Da la casualidad de que estoy atendiendo a uno de esos entierros en vida ahora mismo mientras machaco las teclas para escribir esto. Que quede demostrada mi capacidad para hablar de estos asuntos. 

De acuerdo, lo primero de todo es recomendar al artista Robin Odgen, al que encontrareis en las principales plataformas como OGRE Sound. Un fantástico artista y compositor de música electrónica que crea temas absorbentes y de una riqueza extrema. Perfectos para llenar esos silencios nocturnos a un volumen discreto. 

Para que nos entendamos, vendría a ser una mezcla entre la riqueza de Vangelis y las bases de John Carpenter. Para los amantes del Synth wave es una cita casi obligada.

Según su biografía, una parte importante de lo que hace es crear bandas sonoras para películas inexistentes. Un ejercicio de lo más encomiable dadas las circunstancias y los posteriores resultados. Recomiendo todo su trabajo, pero en especial los álbumes ‘’ Ballard ‘’ y ‘’ 195 ‘’. 

Otra música obligada para estas noches fatídicas es la banda sonora de ‘’ Interestelar ‘’ de Hans Zimmer, al que me daría vergüenza tener que presentar a estas alturas. 

Difícilmente os encontrareis algo tan estremecedor y profundo que llevaros al oído cuando el silencio es el único sonido que domina el ambiente. 

Quiero aprovechar esta oportunidad para hablar un poco del tema ‘’ A place among the stars ‘’ (que estoy escuchando ahora mismo).

Por el título podemos colegir muchos significados e ideas de cómo puede sonar este tema según lo que creamos que proponga. Seguramente estemos todos equivocados si no conocemos el contexto del mismo en la película. 

Siempre que escucho este tema, lo saco de contexto y le doy el que a mí me sugiere si no estoy viendo la película. Para mí, narra el acercamiento de una criatura enclaustrada en una gran capsula en el espacio. Hablo de una criatura nacida en la más profunda oscuridad del espacio. En aquellos lugares donde el hombre ni sabe que tiene que mirar. Algo desconocido y ajeno a toda ley natural. 

Evidentemente, cada uno tendrá su interpretación de un tema tan sugestivo como este, sobre todo cuando el sustento es completamente instrumental. 

Por otra parte, la banda sonora de la película cuenta con otros grandes temas que pueden acompañar perfectamente a estas noches. El tema ‘’ Stay ‘’ nos relata el progreso emocional de la despedida de Cooper y su hija Murph en la granja antes de que este se vaya al espacio. Es un tema que se repite a sí mismo, pero con esas pequeñas variaciones tan bien metidas que hacen de este un tema único. 

Llamo la atención a aquellos que puedan tener un equipo de sonido más sofisticado de lo normal y quieran ganar la mayor riqueza con este tema. Para eso, recomiendo escucharlo de día. Sobre todo, por sus dos minutos finales. A volúmenes bajos funciona como un acompañamiento nocturno genial. 

Antes de que lo deje, permitidme recomendaros un último tema de esta banda sonora. Un tema titulado ‘’ Organ variation ‘’. Es algo repetitivo y cargante, según el momento, pero es imbatible a la hora de crear ambiente. Si hubiera un leit motiv en la película, sería este. 

A pesar de que he abogado por complementar el insomnio, lo más recomendable es intentar conciliar el sueño hasta que no quede más remedio. No recomiendo levantarse de la cama a la primera señal de peligro. El sueño es sagrado y eso debe preservarse, pero para los que somos búhos, la música puede ser un buen refugio para pensar, escribir y leer. 

Daniel 



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