MÚSICA PARA MURCIÉLAGOS FILIPINOS
El otro día bicheando en Skynet, perdón, Internet en busca de imágenes de Batman me encontré varios carteles de las películas de Batman realizadas en Filipinas, casi todas ellas sin pagar derechos ni nada parecido pero repletas de imaginación, eso sí. Había algunas en las que el Hombre-Murciélago se enfrentaba a Drácula mientras que en otras hacía causa común con el mismísimo James Bond. En otras se cambia de sexo y pasa a ser Batwoman, y combatía el crimen y de paso a una reina de los vampiros junto a su hijo Robin. De ésta, por lo visto hay una trilogía. Lamentablemente muchas de ellas se han perdido y no pueden verse hoy en día aunque seguramente habrá algún almacén en Filipinas con las latas de éstas películas puesto que se distribuyeron en los cines del país. Así que por algún lado tiene que haber una copia. Y en todo ése maremoto de información sobre las aventuras del Señor de la Noche en el país asiático me llamó la atención un personaje bastante interesante, el amigo Victor Wood, actor habitual de la productora Sampaguita Pictures que además fue un popular cantante del país en los años setenta y llegó a ser conocido como el Rey del Jukebox. Su disco más famoso apareció en 1972 con el título “In Despair” y en él realizaba algunas versiones de canciones estadounidenses como “Good Golly Miss Molly”, “Jenny, Jenny” y “Rip It Up” todas ellas de Little Richard. También contenía versiones de otros temas como “Pretty Woman” de Roy Orbison, “Runaway” de Del Shannon o “Be-Bop-a-Lula” de Gene Vincent. Personalmente creo que si alguien hace alguna versión más de “Pretty Woman” es posible que se abra una grieta en el espacio-tiempo y salga de ella un ser con cara de pulpo, alitas de murciélago y muy mala leche llamado Cthulhu. Además después de la de Van Halen ya no tiene sentido hacer más. Avisados quedan los músicos, pues. Total que el buen Wood era un auténtico personaje y sólo le faltaba encarnar a Batman en “Fight, Batman Fight” otra versión filipina más del personaje dirigida por Romeo N. Galang y estrenada en 1973 en la que aparecen el Joker, interpretado por Rod Navarro, Robin al que dio vida Roderick Paulate y Catwoman encarnada por Lotis Key. Ah y Batgirl también formaba parte del elenco, personaje del que se encargó la actriz Pinky Montilla. Por lo visto la película era tan lisérgica que Batman llega en un momento dado a viajar al Infierno para enfrentarse a Satán para lo cual se camufla cambiando su uniforme habitual por uno de color rojo, naranja y amarillo. Para esconderse entre las llamas del caldero de Belcebú los mejores colores posibles. Ya se sabe que Batman siempre está preparado para todo, hasta para el Infierno. Romeo N. Galang además de dirigir se encargó también del guión y digo “encargar” por no decir un verbo más ofensivo como “perpetrar”. Uno de los carteles de la película aprovecha una ilustración muy conocida de Superman, obra de Curt Swan y lo transforma en Batman con orejas puntiagudas a lo señor Spock y todo. Quizá algún día un Indiana Jones cinematográfico sea capaz de rescatar todas esas películas filipinas de Batman para que la humanidad pueda disfrutar de ellas como lo hicieron los filipinos en los setenta. Por lo visto eran películas dirigidas a toda la familia y en las que disfrutaban lo mismo los nietos que los abuelos, vamos lo que viene siendo un éxito en taquilla asegurado. Naturalmente como todavía no se había estrenado el Batman de Tim Burton todas ellas seguían la estela de la serie de televisión del personaje protagonizada por Adam West y Burt Ward aunque hubo en los noventa un musical titulado “Alias Batman y Robin” que ya intentaba aprovechar la Batmanía que recorrió el mundo a finales de los ochenta y en el que aparecía no sólo Batman y Robin sino Wonder Woman y hasta Spiderman. Sí amigas y amigos hasta metieron al Trepamuros de la Marvel, con un par (de redes). Lo dicho, éstas películas están pidiendo a gritos resurgir como el Ave Fénix de sus cenizas. En 1974 Wood volvió a encarnar a otro superhéroe, el Capitán Marvel en “Shazam Boom” dirigida por Luciano B. Carlos y con Romeo N. Galang de nuevo de guionista. Finalmente Wood abandonó su carrera como actor a finales de los setenta. Sin embargo la de cantante no la abandonó nunca y llegó a poner en el mercado nada menos que 26 álbumes de estudio, 3 de grandes éxitos y 1 en directo. Incluso durante algún tiempo llegó a flirtear con la política y se presentó a las elecciones al senado de Filipinas. Por desgracia Wood se convirtió en una de las víctimas de la pandemia de Covid-19 y falleció en abril de 2021. En fin, que Dios lo tenga en su Gloria que se lo ha ganado a pulso el buen hombre. Al fin y al cabo ¿cuántos cantantes pueden afirmar que han sido Batman y el Capitán Marvel? Además hostiar a Satán en una película debe de dar puntos para subir al cielo, digo yo. Grande el amigo Victor Nobleza Wood, sí señor. Ea, sigan cuidándose y disfrutando todo lo que puedan y les dejen los demás.
TELLY CHAVALAS
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