British Lion The Burning
Que vamos a contar a estas alturas del grandísimo Steve Harris, bajista y fundador de los grandiosos Iron Maiden. Que es un portento con el bajo, gran escritor de canciones y de música, nos sorprende con un álbum en las puertas de este 2020 y alejados de sus compañeros de la doncella de hierro. Lejos de su estilo metálico que caracteriza a su banda, Harris practica aquí un rock que tiende también a la melodía pero aspira a ser mas intimista. Es cierto que resuenan mucho las típicas cabalgadas de su bajo pero no interponen para nada en la esencia del grupo en general. Es mas le aportan un toque fresco que hace que investigues en todo el sonido mas allá de que intentes buscar melodías que parezcan a Maiden.
Aunque hay que reconocer que en el tema “The Burning” la melodía y el repiqueteo del bajo de Steve no hace mas que recordarnos los orígenes de este ingles, la Maiden tiene un peso enorme en la canción. Yo lo agradezco pero pesa a la hora de la voz porque nos trae ecos de un vocalista inigualable. Aun así la composición es magistral como toso el disco. “City OF Fallen Angel” nos da mas velocidad y algo mas de aporte diferente y mas identidad de grupo, ademas nos da un punto de arranque a la hora acostumbrarnos a lo que escucharemos a lo largo del plástico, esto no es Maiden aunque el martilleo del bajo sea brutal. “Elysium” propone un tema mas melódico y trabajado y mas pausado y tremendamente trabajado, me encanta y es una obra de arte.
En realidad el disco es un trabajo muy concienzudamente hecho por alguien que ama la música. Un señor que como un jefe de las mas latas esferas financieras,que se pone el traje para ir a una oficina,el se coloca su bajo y trabaja hasta conseguir que lo que esta haciendo salga a la perfección, independientemente de lo que este tocando ya sea su banda original o proyectos individuales. El disco suena exquisitamente y es una gozada escuchar canciones como “Lighting” o “Last Chance” sonar así de bien y tan milimétricas.
A titulo personal me gustaría recalcar que los proyectos personales de integrantes con tanto talento me gusta que salgan a la luz porque hace que enriquezca mucho mas el panorama musical y el de la propia banda original, es como un desatasco para que al volver al estudio todos los egos de estos viejos perros callejeros del metal nos deleiten con otro álbum escandalosamente bueno, si cabe, después de 40 años en el negocio. Atentos al tema “Bible Black” como empieza, pareciendo ser una cosa y al final dándonos otra muy diferente, es en realidad la versión en joven de Iron Maiden. Música totalmente renovada en su estilo propio.
Si tienes ganas de escuchar un disco de grandísima calidad, hecho con un mimo increíble y no tienes complejos en escuchar a un viejo dinosaurio del hevea metal haciendo algo que no tiene mucho que ver con su otro proyecto te animo a que te acerques a este “The Burning” que hará que abras los ojos como platos al escuchar algo que suena a algo viejo pero a la vez refrescante.
Alex El Cimmerio
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