Con esta nueva entrega volvían los Judas a sus viejos regueros de música y formación. Volvían a su antigua formación que había sido modificada por la salida de Halford tras su aclamado “PainKiller” y tras cosechar un grandísimo extinto el vocalista decidió relanzar su carrera en solitario probar nuevos caminos musicales. No debió de sentirse muy bien por esos “caminos” porque a los pocos años, con su grupo que se llamaba como el mismo lanzo Resurrection, un álbum absolutamente heavy metal y que a muchos de nosotros nos hizo pensar “pero porque diablos se fue de Judas”.
Lejos de conjeturas varias lo que quedaba claro que la vuelta al grupo no iba a tardar demasiado. El pobre de Tim “Ripper” Owens fue el que salió mal parado. Con una brillante voz el chaval fue practicante despedido porque el dios del metal quería recoger su puesto y legado. Y los mismos componentes del grupo no dejaron pasar esta oportunidad.
Con una gira de reunión en 2004 giraron con una enorme parafernalia al estilo 80`S dándonos lo que verdaderamente queríamos ver. Un espectáculo digno de los dioses del metal. Y mi primera vez viendo a Judas. La verdad que tengo buen recuerdo de ese concierto en la plaza de toros de Valencia.
Y como no, un año después nuevo trabajo que abría unas grandes expectativas para comprobar si se las volvían apañar otra vez reunidos en formación clásica. Y la cosa, que quiere que les diga, funciono a las mil maravillas. Y es que ya desde su primera pista el disco nos da ese toque de heavy metal y las dos guitarras de K.K. Downing y Glen Tipton a plena potencia y con sus destacadas batallas de guitarras a dos bandas, donde perfectamente podemos intuir su típico baile a coro tocándolas. El disco es muy variado y contiene temas de corte clásico con algún que otro tema que Halford introduce como refresco en estos tiempos modernos.
En definitiva, una vuelta de su vocalista, que como sus vecinos Iron Maiden supieron hacerla bastante bien. Y también supuso la segunda “Resurrección” para el bueno de Halfrod que parece invencible.
Alex El Cimmerio
Nunca han querido reconocerlo pero la historia en que se basaron para la película Rockstar, es básicamente la historia del desencuentro entre Judas Priest, Halford y Owens. En otro aspecto tengo que decir que Halford ha intentado ir más allá del sonido tipico de Judas en su carrera en solitario, y que no recuerdo si en 2004 antes de Valencia los vimos en Madrid con el Rober y el Ramos.
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