MÚSICA PARA RATAS MUTANTES
Cambios. Hoy viene al pelo el tema porque vamos a hablar de David Bowie, concretamente de su disco “Never Let Me Down” al que por lo que he visto todo el mundo le mete leña. A ver, yo no soy un super experto en el amigo Bowie pero he de decir que éste disco al que todo el mundo le da cera me gusta mucho. Bueno, yo no soy super experto pero he de decir que ya escuchaba a Bowie en la radio en los ochenta y disfrutaba con sus canciones, “Let’s Dance” y “China Girl” concretamente. Así que aunque no soy un super experto y no tengo todos sus discos puedo decir que su música me gusta. Y además le llamaban el Camaleón del Rock así que es normal que cada disco no se parezca, algo que es de agradecer ya que hay otras famosas estrellas de la música cuyas canciones y discos son todos muy parecidos o iguales. Lo bueno de Bowie es que no sabías lo que te ibas a encontrar pero te encontraras lo que te encontraras estaba muy bien hecho. Qué leñes. Y eso se puede decir de éste disco tan denostado. Ya he comprobado que la masa y por masa me refiero a un grupo enorme de gente y no al amigo Bruce Banner, arremete contra algunas cosas no se sabe muy bien por qué. Y luego gente que ha pertenecido a esa “masa linchadora” reconoce en ocasiones que se equivocaba o que se dejó llevar. Pasó con la película “Batman v. Superman: el amanecer de la justicia” a la que todo el mundo le dio palos sin saber muy bien por qué. Yo mismo he pertenecido a “masas linchadoras” de vez en cuando. O en ocasiones he formado yo mismo una “masa linchadora” de una sola persona, como en el caso de “Los últimos Jedi”. Pero reconozco que a veces uno cambia. Ya sé, ya sé que todas las teorías psiquiátricas dicen que después de cierta edad la gente ya no cambia. Pero yo he cambiado de opinión muchas veces. No, con “Los últimos Jedi” no he cambiado de opinión. Me sigue pareciendo una puta mierda. Pero a veces cambio de opinión con otras cosas. Por ejemplo recientemente me ha pasado con el libro “La rata de acero inoxidable” de Harry Harrison. Es un libro que me costó muy poco dinero y que he dejado a medias en un par de ocasiones. Y hace una semana me dio por volver a intentar leerlo y me lo he acabado tan pancho, oiga. Y sin saber porqué lo dejé en las otras dos ocasiones porque no está nada mal. Supongo que las circunstancias vitales de cada persona van cambiando y a veces tienes opiniones que luego van mutando, vaya usted a saber. Pero ya les digo que no puedo explicarme el motivo por el que dejé ése libro a medias un par de veces. Misterios de la mente humana. O mutante, eso ya va en gustos. Total que los cambios existen y nada mejor que un disco de David Bowie como el “Never Let Me Down” para disfrutar de ellos. De hecho parte del libro me lo he leído escuchando ése disco, uno de esos discos que me puedo poner en bucle, por cierto. Esos en los que no hay ninguna canción que no te guste, cosa que no puedo decir de todos los discos del amigo Bowie, la verdad. Hay algunas canciones suyas que me resultan cargantes, la verdad. Quizá por eso no soy un superexperto de su música. Pero ya les digo que éste disco no está tan mal como dicen por ahí. Entre las canciones que más me gustan del mismo destacaría “Time Will Crawl”, “Day-In-Day-Out”, “Beat of Your Drum”, “Zeroes” o la que da título al disco “Never Let Me Down”. Ya me lo advirtió mi amigo Miguel Ángel que sí era un super experto en David Bowie. Él sí tenía todos sus discos y me recomendó éste. Y me alegro de haberle hecho caso. Así que por lo menos un superexperto de Bowie está conmigo, oiga. Ahora no sólo tengo que buscar más discos de Bowie a ver si me dan el carnet sino que de paso voy a ver si le echo las urpas a algún otro libro de “La rata de acero inoxidable” que son muy divertidos. Ea, ya saben, como decía otra famosa rata, no olviden supervitaminarse y mineralizarse. Y sobre todo disfruten y cuídense mucho.
TELLY CHAVALAS
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