Se acercan las navidades y para mí eso significa Tierra Media. En forma de literatura, cine o música. Por lo que sea, hoy hablaré de la música. Concretamente quiero comentar la banda sonora de ‘’ El Hobbit ‘’, una trilogía muy denostada por motivos que no nos interesan ahora, pero que cuenta con esa constante que, en gran medida, distinguió a la anterior trilogía: la música.
Es difícil explicar lo que Howard Shore consiguió con ‘’ El señor de los anillos ‘’, pero es fácil decir que volvió a hacerlo en ‘’ El Hobbit ‘’. Hablo en términos de equivalencia, no literales. La efectividad de la música en ‘’ El Hobbit ‘’ es equivalente a la de ‘’ El señor de los anillos ‘’ y elevar el relato parece ser su principal efecto. Ese podría ser el distintivo de estas bandas sonoras. Crear un relato que quede encima del realto, le dé significado y se conviertan en un elemento independiente que el oyente pueda disfrutar sin la presencia de las imágenes. Diría que hasta la música tiene un sentido narrativo que evoca a las imágenes de las películas. No es poca cosa si consideramos que muchas bandas sonoras se quedan en un simple acompañamiento diseñado casi en exclusiva para acelerarnos en escenas de tensión.
No se puede hablar de esta banda sonora sin mencionar la colaboración de los actores que interpretaron a los enanos en la canción ‘’ Misty Mountains ‘’, uno de los grandes distintivos de esta trilogía y late motiv de los enanos. Es una referencia fiel al primer capítulo del libro en el que los enanos empiezan a sacar instrumentos y cantan alrededor del fuego. En ese sentido, un diez para la película. Como parte más representativa de la banda sonora de la primera película, contactaron con el cantante neozelandés Neil Finn, vocalista del grupo Crowded House y Split Enz, para que la cantara en un track que podeis encontrar al final del álbum de ‘’ Un viaje inesperado ‘’. Recuerdo con cariño el streaming que hicieron en aquel lejano 2012 de la premiere en Nueva Zelanda y dejad que os diga que fui una parte muy activa de todo este tipo de actividades. Mi implicación con esta trilogía fue tanta como pudo ser. Para mí todo era un acontecimiento y estaba al límite de una edad en la que todavía vivía con una ilusión infantil todos estos acontecimientos. Puede que la ilusión siga ahí porque al escribir estas palabras me están dando ganas de mandarlo todo a la porra y ponerme con una maratón de Tierra Media que me lleve por delante.
Volviendo a la banda sonora, hay un detalle que me voló la cabeza en su momento. Seguro que ya he dicho en más de una ocasión que amo Spotify y que casi lo puedo considerar una extensión de mí. Bueno, pues eso me ha llevado a establecer conexiones entre temas musicales a lo largo de los años, y cuando publicaron el álbum de ‘’ La desolación de Smaug ‘’ encontré un leit motiv que le dedicó a los elfos silvanos. Los tracks más destacados son ‘’ Feast of Starlight ‘’, ‘’ Kingsfoil ‘’ y ‘’ Beyond the forest ‘’. En estos temas encontrareis la parte más reconocible de la banda sonora de ‘’ El silencio de los corderos ‘’, que, curiosamente, también compuso Howard Shore. Esto no es ni bueno ni malo. Es natural y los compositores beben de ellos mismos y de su entorno. Es algo que debemos aceptar. El caso es que aquí la jugada es maestra y memorable. Escuchad estos temas y sopesad si no están entre los temas más bonitos que habéis escuchado. Sobre todo, los primeros dos minutos de ‘’ Beyond the forest ‘’.
Los tres álbumes son una maravilla y se pueden encontrar momentos en los que Howard Shore realmente se la juega. Si os acordáis de la batalla del concilio blanco contra Sauron en Dol Guldur, la música que suena no es cañera ni lo que estamos acostumbrados en momentos como ese. El tema está imbuido por una solemnidad que se mantiene incluso en el momento de mayor tensión y es algo que he visto mucho en videojuegos. Prima la personalidad de lo que provoca la situación que la situación en sí. El tema se titula ‘’ Guardians of the three ‘’ y, desde luego, es para gozarlo a gusto.
Recomiendo que repaséis estas películas y os dejéis mecer por sus bandas sonoras. Siguen siendo entretenimientos de primer nivel y hay algo bonito en entregarse a una aventura de estas características en navidad.
Daniel
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