MÚSICA PARA CHISMOSOS GALÁCTICOS
Últimamente anda algo revuelta la comunidad de seguidores de “Star Wars”. ¿Y cuándo no? preguntarán ustedes. Pues también es verdad. Debe de ser algo ya habitual. Cuando se estrenaron las precuelas estaban los fans de las mismas contra los que les gustaba más la trilogía original y que habrían torturado hasta la muerte a Jar Jar Binks si no hubiera sido un personaje creado por ordenador. Cuando Disney perpetró las secuelas volvió a pasar lo mismo. Será que como la historia al final siempre versa de una guerra civil galáctica los aficionados acaban formando bandos para discutir si el último capítulo de la serie “Ahsoka”, por ejemplo, ha salvado “Star Wars” o la ha hundido más en la mierda. Con dicha serie los aficionados han vuelto a formar dos bandos y discuten interminablemente sobre la serie y sobre si Dave Filoni, el guionista y productor de la misma es un digno heredero de George Lucas o un simple Judas. La cosa llega a tales extremos que puedes ver una reseña de un capítulo en un podcast en el que te lo ponen mal y luego lo ves y piensas: “bueno, no es para tirar cohetes, pero no estaba tan mal como aseguraban”. A mí personalmente sólo me han gustado dos capítulos de los siete que he visto. Y temo ver el último, la verdad. El gato escaldado del agua fría huye y ya no me fío nada de Lucasfilm desde 2018 aunque de vez en cuando han hecho cosas potables como “Rogue One” o la serie “Andor”. Otros se dedican a criticar a la esposa de Dave Filoni porque es una aficionada al mundo del ocultismo y su seudónimo es “te espero en la puerta del cementerio”. Escuché en un programa el otro día a un señor bastante tolerante diciendo que porque haga el signo de los cuernos no quiere decir que sea satánica sino que simplemente tiene una edad y en su juventud seguro que disfrutó de la música de Dio y de la explosión del Heavy Metal. Dejando tranquila a la señora parienta de Filoni que tendrá sus hobbys como los tenemos todos, lo cierto es que hay diferencias incluso entre los coleccionistas de figuras. Unos prefieren las grandes de seis pulgadas de la colección "Black Series" mientras que otros defienden a muerte las de 3 pulgadas y pico de toda la vida con la que puedes tener vehículos y formar dioramas más fácilmente. “Construir mundos” como le llaman ellos. Así que el día que escuché lo de la esposa supuestamente satánica de Filoni decidí rescatar de la estantería el disco de Iron Maiden “Number of the Beast” que trae grandísimas canciones como “Run to the Hills”, “The Prisoner” homenaje a la serie de televisión de finales de los sesenta protagonizada por Peter McGoohan, “Children of the Damned”, “Hallowed Be Thy Name” o la que da título al disco “The Number of the Beast”. Iron Maiden y Dio son las mejores opciones para acompañar la lectura de libros de "Warhammer 40.000". Si les da a ustedes por explorar ése mundo prueben primero con autores como Dan Abnett o Aaron Dembski-Bowden ya que son una apuesta segura. Terminé algo harto del anterior libro de “Warhammer 40.000” que me leí, aquél de los terminators egipicios que ya les comenté pero Dembski-Bowden me ha devuelto la fe con “La lanza del emperador” que he disfrutado mientras escuchaba “The Number of the Beast”. Voy a tener que poner un generador de campo Geller en casa no vaya a ser que se me cuele algún ente demoníaco de la disformidad. Para los que no han leído nada de éste universo les diré simplificando bastante que es como si mezclaras “Apocalypse Now” con “El exorcista” y le echaras una pizca de “Star Wars” para darle algo de sabor. De hecho los Adeptus Astartes son como los Stormtroopers con la diferencia de que miden casi tres metros, son unas malas bestias que usan unas espadas motosierra y éstos sí dan en el blanco cuando disparan. Y para seguir chismorreando un poco más de “Star Wars” les diré que la próxima serie titulada “The Acolyte” tiene una pinta malísima, ya les aviso. Avisados quedan. Ya saben, no olviden supervitaminarse, mineralizarse y tengan cuidado con los pactos que hacen con seres de otras esferas que luego viene San Pedro con las rebajas. O los Adeptus Astartes con el bólter.
TELLY CHAVALAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario