El Cajón de Telly Chavalas

MÚSICA PARA TIEMPOS MÁGICOS

Ya les he contado en alguna que otra ocasión que me tocó hacer el servicio militar, conocido popularmente como “la mili”. Lo que no sé si les he contado es que me tocó hacerla en Ceuta o como lo llamaron en las listas del destino “territorios extrapeninsulares”. Cuando lo leí me recordó al anuncio flotante aquél que salía en “Blade Runner” en el que invitaban a los ciudadanos de Los Ángeles a “visitar las colonias del mundo exterior”. Al final iba a acabar como el puto Roy Batty y todo. Total que después de pasar una noche en un tren nocturno con destino a Algeciras allí tuve que pillar un ferry para cruzar el Estrecho de Gibraltar. Muy colonial todo. Y como los reemplazos entraban más o menos los mismos días en los que se licenciaba un reemplazo anterior el cachondo del capitán del ferry había puesto a todo trapo la canción “Libre” de Nino Bravo para alegrarle la vida a los que se iban para casa. Sin embargo cuando el ferry volvía a Ceuta no tuvo la delicadeza de quitarla o cambiar de tema y poner por ejemplo “Welcome to the Jungle” de los Guns N’ Roses. No, el caballero tuvo a bien dejar la cancioncilla de Nino Bravo y de rebote tocarle las pelotas a todos los que nos íbamos a pasar nueve mesecitos muy ricos en la ciudad autónoma pegando barrigazos. Así que desde entonces digamos que aprecio la calidad musical del amigo Nino Bravo pero me repatea escuchar sus canciones. Supongo que al científico aquél que puteaba perros, Pavlov le habría encantado la situación y habría tomado notas y todo. También me pasa con la canción moñas ésa de Louis Armstrong “What a Wonderful World”. Desde que vi “Doce Monos” (1995) de Terry Gilliam me corre por un escalofrío por la espalda cada vez que la escucho por ahí en alguno de los muchos anuncios que la usan a lo largo de los años. Y si no la han visto ya tardan, no sé cómo pueden vivir sin ver una película en la que Bruce Willis viaja por el tiempo. Y cuando la vean sabrán el porqué de los escalofríos. Así que de vez en cuando la música también sirve para acompañar momentos chungales, no se crean y probablemente se quede más fijada que una canción que hemos oído durante algún buen momento. Algún momento mágico de ésos que usó el colega Van Morrison para titular el disco que les voy a recomendar hoy: “Magic Time”. Ya que les he aburrido con una historieta de mi puta mili por lo menos darles algo positivo.  Apareció en el mercado en mayo de 2005 y es su trigésimo primer álbum nada menos. Tiene algunas canciones muy buenas como “Keep Mediocrity At Bay”, “Stranded”, “Evening Train”, “Gypsy In My Soul” o “Carry On Regardless”. A Van Morrison le sigo la pista desde que escuché su “Moondance” en la banda sonora de “Un hombre lobo americano en Londres” (1981) de John Landis que contiene otras grandes canciones de Bobby Vinton, Sam Cooke, la Creedence Clearwater Revival o The Marcels. Un buen día de visita en la Biblioteca Municipal buscando lectura acabé en la sección musical en la que tenían multitud de CDs y acabé llevándome a casa éste para escucharlo. Sí amigas y amigos, en las bibliotecas públicas se pueden pillar cosas muy guapas, las usas una semanita o un mes, dependiendo del formato, y luego las devuelves y tan pancho. Al fin y al cabo lo más importante de un objeto es usarlo y disfrutarlo. Vale, reconozco que luego me encontré éste CD en oferta y me lo compré. También me pasó con un cómic europeo de ciencia-ficción “Los náufragos del tiempo” de Paul Gillon. Disfruté toda la serie en la biblioteca y a la vuelta de un par de añitos me la encontré en una tienda de cómics completa por sólo nueve euritos. Así que como me había gustado me la compré. Pero vamos, que en las bibliotecas tienen mucho material que se puede disfrutar gratis. Ah y si quieren y les gusta viajar visiten Ceuta, es una ciudad muy bonita, tiene murallas, algún que otro museo, playas, muchas cuestas y en casi cualquier parte de ella puedes ver el mar. Ea, no les aburro más con mis frikadas, cuídense y disfruten todo lo que puedan.

 

TELLY CHAVALAS